Le pedí a mi chatbot de IA que me ayudara a escribir la introducción de esta columna. Quería ver qué sacaría de la vasta colección de historias sobre el estado actual del trabajo. El chatbot compuso un párrafo lleno de adjetivos que provocan ansiedad, como volátil, impredecible, fluido, frenético y fragmentado (al parecer, los chatbots aman la aliteración). Habló de avances tecnológicos implacables, fluctuaciones económicas vertiginosas, transformación constante, ambigüedad y caos.

Pero también mencionó “posibilidades sorprendentes”.

Los líderes empresariales y de diseño comparten estos sentimientos (con un poco menos de dramatismo), pero está claro que muchas cosas están cambiando y los patrones de trabajo están en transición. Lo que hacemos, cómo lo hacemos e incluso por qué lo hacemos está evolucionando. Hay oportunidades para las organizaciones que logran aprovechar las circunstancias cambiantes y pasar del caos a la acción.

Ahora hay grandes cambios que contribuyen a la necesidad de transformar el lugar de trabajo, y dos destacan: los bots y los cerebros.

La mayoría de las organizaciones intentan aprovechar las capacidades de la IA para obtener una ventaja competitiva. Los líderes saben que deben adaptar sus lugares de trabajo en la era de la IA, pero muchos no están seguros de qué hacer o cómo apoyar los nuevos patrones de trabajo. En la investigación más reciente de Steelcase realizada con líderes estadounidenses, el 88 % de los responsables de instalaciones e inmobiliarias informan que esperan cambiar sus oficinas en los próximos 3 a 5 años debido a la integración de la IA. Más de la mitad prevé la necesidad de espacios más flexibles a medida que la IA cambia los comportamientos en la oficina.

Pero investigaciones recientes del MIT y otros sugieren que las organizaciones no han logrado los aumentos de productividad deseados con las inversiones en IA: el 95 % de los proyectos piloto fracasan, según The State of AI in Business 2025. Es temprano en el camino para la mayoría de las empresas, y las cosas seguirán desarrollándose y probablemente mejorarán. El paso esencial ahora es reconocer que la IA no va a cambiar simplemente cuánto tiempo pasan las personas en sus computadoras. Las organizaciones deben invertir en crear lugares que ofrezcan lo que más necesita su fuerza laboral humana: interacción social, colaboración y rejuvenecimiento mental y físico.

La urgencia por el bienestar de los empleados sigue siendo un área de enfoque para muchas organizaciones y la salud cerebral está emergiendo como una preocupación particular.

A medida que más personas comienzan a trabajar extensamente con IA, la necesidad de que los humanos estén cognitivamente sanos, creativos y curiosos es esencial.

El 40 % de los líderes encuestados por Steelcase reconoce una mayor necesidad de conexiones entre personas para compensar el aumento de las interacciones con computadoras.

“¿Qué necesita hacer el cerebro, ahora y en el futuro?” pregunta Thomas Seitz del McKinsey Health Institute. “Trabajar con IA es una forma muy diferente de trabajar, pero es una forma que exige mucho más al cerebro… Estás pensando todo el tiempo. Si no le das descanso a tu cerebro, no solo serás improductivo, sino que te pondrás a ti y a otros en problemas… El pensamiento creativo será más importante que nunca.”

Sin embargo, no basta con que los líderes fomenten más interacciones humanas y pidan a los empleados que sean más innovadores. El diseño intencional del espacio físico de trabajo puede crear las condiciones para que las organizaciones y las personas sean más resilientes ante el cambio y prosperen.

Steelcase Community-Based Design es un enfoque respaldado por la investigación que puede ayudar a las organizaciones a adaptarse a las condiciones cambiantes y permitir que las personas cambien fácilmente entre el trabajo enfocado – ya sea solos o con un compañero de IA – y la colaboración con otros humanos. Ofrece ideas de diseño para crear infraestructura social, lugares que promuevan la tan necesaria interacción social. Los lugares de trabajo diseñados con estos principios apoyan los nuevos tipos de trabajo que la gente necesita hacer, pero también ayudan a crear un sentido de comunidad en el trabajo. Y cuando las personas sienten que son parte de una comunidad, también tienen mayores niveles de bienestar, compromiso y productividad.

En las próximas semanas y meses, Work Better explorará cómo está cambiando el trabajo ahora y cómo seguirá evolucionando. Ofreceremos ideas prácticas para realizar cambios en el lugar de trabajo que ayuden a las personas a prosperar en medio de tanto cambio. Seguiremos recurriendo al conocimiento de nuestros socios tecnológicos, como Microsoft, Logitech y Zoom, para proporcionar ideas sobre cómo integrar espacio y tecnología. Nuestro objetivo es brindarle la información que necesita para pasar de un estado de ambigüedad, volatilidad y caos a un lugar de posibilidades sorprendentes.